UN PROYECTO · Según la RAE, un parquee es un terreno destinado en el interior de una población a prados,  jardines y arbolado para recreo y ornato. Se trata de una resolución de un parque de especiales características, debido a su situación con respecto  la ciudad como al papel desempeñado en contacto con su entorno inmediato.

 

UN LUGAR · Zaragoza, meandro de Ranillas del rio Ebro, al noroeste del casco histórico. A priori alejado del centro de la ciudad, está bien conectado con el centro  mediante el puente del milenio. Se plantea el parque  que tiene como límite con el solar una mota elevada que protege el interior del meandro de las crecidas del río Ebro.

 

UN PROGRAMA · Se plantea el proyecto como un complemento de las dotaciones preexistentes en el lugar. Éstas serán un centro de interpretación del meandro, con aulas al aire libre, puntos de avistamiento de aves, ... Un segundo elemento programático serán unas instalaciones polivalentes destinadas a albergar principalmente la exposición floral “Floralia”, así como un mercado semanal de productos naturales. Por último unas instalaciones deportivas que dispondrán además de gimnasio, vestuarios y pista de jogging, una piscina de olas para la práctica lucrativa de surf.

 

Como programa complementario a los principales, se han planteado en el proyecto cabinas de baños, almacenes de mantenimiento, una cafetería y un restaurante.

 

UNA IDEA · El Meandro de Ranillas, último vestigio completamente natural de la zona, se presenta como punto y final de una serie de actuaciones. La expo de Zaragoza, lugar absolutamente urbanizado y domesticado, y el parque del agua, que presenta características de naturaleza manipulada por el hombre. El proyecto se planteará como última etapa de transición entre urbanización y naturaleza, generando un filtro entre estas anteriores actuaciones y la naturaleza de lo más profundo del meandro.